La artroscopia de rodilla es un procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo empleado para reparar meniscos, ligamento cruzado anterior y posterior, inflamación, desalineación de rótula, fracturas o defectos en cartílagos, entre otros.

Para llevar a cabo una artroscopia se realizan pequeñas aperturas en la rodilla por donde se introduce una solución salina que expande el tejido y permite la introducción subsecuente de una pequeña cámara e instrumentos quirúrgicos. El médico especialista procederá entonces a corregir la afección.

El costo de una artroscopia de rodilla depende del hospital en Monterrey en el que decida recibir su tratamiento. Sin embargo, dado que es una cirugía menor, una estadía hospitalaria puede resultar innecesaria; a pesar de esto, debe considerar dentro del precio el uso de anestesia general.

• Meniscos: Los meniscos son piezas de cartílago con forma de media luna que se encuentran en la rodilla; cumplen la función de amortiguadores entre la tibia y el fémur, dos de los huesos que conforman la pierna. Debido a su propósito, suelen lastimarse con mayor frecuencia cuando se practican deportes de alto impacto, aunque también pueden lesionarse en situaciones comunes al realizar movimiento súbitos.Tanto la rotura como el desgarro de meniscos requieren de tratamiento para lograr una recuperación exitosa, aunque este puede variar dependiendo de la gravedad de la lesión. En algunos casos no se necesita de más que reposo y aplicación de compresas, tanto frías como calientes, para desinflamar y aliviar, sin embargo, hay casos que pueden requerir de una operación.La cirugía de meniscos se puede realizar por vía artroscópica, un procedimiento mínimamente invasivo cuyo tiempo de recuperación es reducido. Finalmente, para reparar correctamente un menisco lesionado se deben seguir las instrucciones de un médico especialista y de su fisioterapeuta.

• Ligamento Cruzado:  Los ligamentos cruzados son tejidos que ayudan a mantener en su lugar a la tibia para que ésta no se deslice por debajo del fémur. Usualmente, una lesión en un ligamento cruzado sucede por la práctica de deportes que requieren de movimientos súbitos, tales como el fútbol, básquetbol, tenis, voleibol y gimnasia, entre otros.Cuando un ligamento cruzado anterior o posterior está roto se escucha un chasquido fuerte seguido de dolor intenso que imposibilita continuar con la actividad que se esté realizando. Asimismo, hay hinchazón y pérdida de amplitud de movimiento. Es importante buscar atención médica especializada rápidamente si se presentan los síntomas de un ligamento cruzado anterior o posterior roto para evitar complicaciones.Las lesiones en un ligamento cruzado pueden ser tratadas adecuadamente sin la necesidad de llegar a una cirugía. Reposo, aplicación de compresas y una elevación correcta, así como el seguimiento de instrucciones para la rehabilitación son suficientes en muchos casos. Sin embargo, si se ha roto el ligamento o se trata de un deportista de alto rendimiento puede ser recomendable llevar a cabo una operación.La cirugía de reparación de ligamento cruzado anterior y posterior se puede realizar por vía artroscópica, por lo que el costo no suele ser demasiado elevado dado que la estadía hospitalaria suele ser corta.

Artroplastia

La artroplastia de rodilla es el procedimiento quirúrgico de remover una parte dañada de la articulación y reemplazarla por una prótesis. Usualmente se lleva a cabo para aliviar el dolor provocado por la artritis, particularmente cuando éste no permite dormir por las noches, realizar actividades cotidianas o no mejora con otros tratamientos. De la misma forma, la artrosis de rodilla, el desgaste del cartílago, es una de las razones más comunes entre deportistas por las que se realiza la cirugía.

Cualquiera de las dos afecciones mencionadas, entre otras, pueden llegar a requerir de un reemplazo total de rodilla, en cuyo caso toda la articulación será sustituida por una prótesis.

El pronóstico de recuperación es de entre 3 a 4 semanas para poder caminar sin la necesidad de un bastón o apoyo externo. Sin embargo, se debe considerar que la fisioterapia puede llegar a requerir de 4 a 6 meses, pues la rodilla es no sólo la articulación más grande, sino que además sostiene la mayoría del peso cuando se está de pie.